Un país de tontos

Aunque ha pasado cierto tiempo no puedo aguantarme. Islas Canarias, carnaval, concurso de Drac Queen; ¿estamos situados? Uno de estos personajes esperpénticos, a la postre ganador del concurso de Drac Queen, sale disfrazado de la Virgen María y a través de su excéntrico espectáculo queda postrado en una cruz en una pobre y triste representación de la crucifixión de Cristo que sobrecoge por su mal gusto.

Yo soy cristiano pero creo en la libertad religiosa dentro de unos parametros naturales. El espectáculo que se produjo en el carnaval de Gran Canaria fue una ofensa total contra el cristianismo a la par que un ataque frontal al buen gusto. Resulta curioso ver como la democracia española consiente y alienta la ofensa a todas las tradiciones y costumbres de nuestra sociedad, incluido algo tan íntimo como el sentir religioso, mientras promueve y protege costumbres y tradiciones foráneas o nuevas invenciones del capital o el multiculturalismo.

  Si los mismos españoles toleramos y consentimos que nos tomen el pelo de esta flagrante forma, sólo queda considerarnos como un país de tontos.

  Desde estas líneas animo a los Drac Queen a que el año que viene en carnaval hagan un espectáculo sobre Mahoma y Alá,.... ¡haber que tal parados salen, fisica y mediaticamente!