¡ESPAÑA NO SE VOTA!
Políticos ineptos, tanto catalanes como del resto de nuestra maravillosa nación, se revuelcan en sus propios egos y pasmódicas ideas. Lo peor de todo es que en su 'carrera hacia ninguna parte' arrastran a un pueblo unido durante siglos a enfrentarse los unos a los otros, como ya ocurriera aquí hace ochenta años, sin atender a las consecuencias.
La unificación de esta nación, una de las más antiguas de Europa, costó siglos de lucha. Los años de la transición postfranquista y ese ansia de pseudolibertad hicieron que los políticos de esa época erraran su forma de interpretar la idea de España, despedazándola en autonomías, alimentando el independentismo, mimando a la ultraizquierda y dejando hacer a cada cual lo que le venía en gana, en vez de fomentar, promocionar y cultivar el respeto entre las distintas culturas, lenguas y pueblos que forman España.
En estos tristes tiempos modernos cada uno hace, en aras de la libertad, su propia versión de la historia y una adaptación personal de conceptos como justicia, libertad o democracia.
¿Qué nos quedará por ver?
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